sábado, 31 de julio de 2010

Un Hombre Corriente

In my opinion;


Érase una vez un hombre gris... y aunque parece que todo está dicho ya, su historia merece ser contada.

Madrugaba, iba al trabajo, trabajaba y trabajaba, volvía a casa, cenaba, leía El Quijote y dormía. Algún que otro domingo, bajaba al bar de la esquina y tomaba café, sólo, solo.

El hombre estudió porque sí, sin interés ni pasión, como su vida...

Trabajó porque sí, sin esfuerzo y con desidia.

Se casó porque sí, sin felicidad.

El hombre fue padre porque sí, sin quererlo demasiado, como a su vida...

Segismundo López López, que así se llamaba, vivió una triste y aburrida vida. Murió hace ya años, mientras leía El Quijote.



No hay comentarios:

Publicar un comentario